Buscar

Portavoz

ABC

Capacitación digital para todos

.

La primera percepción que tenemos de una crisis es el peligro. En algunas ocasiones bajo un intenso dolor, como nos ocurre en la pandemia actual. Pero también puede suponer una oportunidad de cambio sostenida por una tendencia que ya existía previamente. Ese es el caso de la transformación digital de la sociedad que se ha acelerado de forma exponencial durante el confinamiento, una de las pocas cosas positivas que nos ha traído esta terrible crisis sanitaria. Y nuestros mayores, los más vulnerables a la Covid-19, están entre sus principales beneficiarios.

Muchos han descubierto que con internet se puede hacer prácticamente de todo. Tener una consulta con el médico, encargar medicinas, tratar con la administración, comprar, acceder a servicios privados y, sobre todo, informarse. Lo fundamental durante los peores momentos del confinamiento es que nos ha servido a todos para comunicarnos. Da igual lo lejos que estemos, podemos hablar y vernos las 24 horas del día. Luchar contra la soledad y la exclusión social ha sido una prioridad durante el periodo de alarma. Pero para las personas mayores que viven en zonas rurales remotas y cada vez más despobladas, siempre es prioritario.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) habla de la “revolución inclusiva” como el objetivo a perseguir para lograr una sociedad más digital. Para la institución supranacional la digitalización conlleva mayor crecimiento económico y prosperidad. En un periodo tan difícil como el actual ha facilitado la implementación del apoyo imprescindible de los gobiernos a familias y empresas.  En muchos países avanzar en la deseada digitalización se enfrenta al obstáculo tecnológico de infraestructuras limitadas. Sin embargo, en España todos los estudios muestran que la principal carencia es la capacitación de la sociedad, desde el capital técnico humano hasta la propia formación digital de los usuarios. Las autoridades y el resto de los agentes económicos tenemos que hacer todo lo posible para superar este obstáculo. Nadie se puede quedar al margen de los beneficios de la digitalización. Y la edad no debe ser un impedimento para avanzar, como no lo debe ser tampoco para el resto de las facetas importantes de la vida.

La Fundación AEB, de la Asociación Española de Banca, y la Fundación Cibervoluntarios han puesto en marcha la tercera edición de Expertclik, su programa gratuito de formación digital para personas mayores de 55 años que residen en zonas rurales de toda España. La principal diferencia con respecto a los dos programas anteriores es que en esta ocasión la formación será totalmente online, con un aula virtual de máximo doce alumnos, para evitar todo riesgo de contagio. Ayuntamientos y entidades sociales que representen a mayores pueden presentar su solicitud para participar en este proyecto en la página www.expertclick.org .  El objetivo final del programa es que saquen el máximo partido a la digitalización y con ello mejoren su calidad de vida.

Los 100 talleres que se inician desde ahora hasta final de año constan de tres sesiones de hora y media de duración cada una, en las que a través del móvil o la tableta se enseñara desde una perspectiva práctica como manejarse en internet con confianza y seguridad. Estas son las tres características que definen la iniciativa. Se trata de una formación personalizada y acompañada más allá de las sesiones, con un canal de refuerzo telefónico que estará vigente hasta un mes después de que acabe el programa.

La COVID-19 ha cambiado nuestra forma de vivir y de trabajar. También está cambiando la forma en que las empresas producen y se relacionan con los clientes. Está por ver cuántos de todos estos cambios son definitivos. Lo que sí es seguro es que la tecnología digital que ya formaba parte de nuestra vida antes de la crisis ahora ya es imprescindible. Conozcamos todas las posibilidades que ofrece para hacernos la vida más fácil, especialmente en contextos tan complejos como el actual.

José Luis Martínez Campuzano, portavoz de la Asociación Española de Banca

Descargar el artículo